Querido Galileo, Estas líneas son para darte la enhorabuena por tu rehabilitación 360 años después de que te condenaran ignominiosamente. No te condenaron por dañar a nadie ni por cometer un delito, sino por defender una concepción de nuestro sistema solar que, en la época, parecía ir contra los prejuicios y dogmas dominantes, celosamente defendidos por la Iglesia. Te gustará saber que esa concepción tuya es hoy aceptada universalmente y hasta enseñada en las escuelas. Me resisto a desearte que te encuentres bien al recibo de la presente, como se solía decir en las cartas de antaño, porque supongo que la amargura con que abandonaste este mundo no se borra tan fácilmente. Y menos con una simple rectificación que, de tan tardía, te provocará, todo lo más, una triste sonrisa. Reconocer lo que es evidente, admitido por todo el mundo y comprobado hasta la náusea no es un gran mérito ni puede contrarrestar todo el mal que se hizo cuando se podía hacer. Seguir hoy manteniendo la intolerancia
Este es nuestro espacio, en él encontrarás enlaces de utilidad o de interés para complementar los materiales de este curso (menú desplegable arriba derecha). Además este es un espacio de creación. Aquí mostraremos los proyectos de clase y podrás dar paso a tu creatividad. Si escribes y te animas a compartir... cuéntanos en AQUÍ SE CREA.