En este texto expositivo se desarrollarán las características principales para que se pueda construir un buen texto argumentativo.
En los textos argumentativos abunda la función expresiva y apelativa, por lo que se centra en el receptor. No se usa la 3ª persona, sino que la 1ª y 2ª del plural y la 1ª del plural. Además, podemos observar sustantivos, adjetivos y adverbios valorativos en mayor cantidad. No obstante, existen diferentes clases de textos argumentativos según su estructura: analítica, que presenta la tesis antes de los argumentos y la sintética, que a partir de los argumentos es capaz de fundamentar la tesis. Aunque se pueda confundir, es importante distinguir entre tesis y tema, que no son la misma cosa. La tesis es la opinión que el autor trata de defender, por eso, el autor utiliza marcas de subjetividad. Por otra parte, el tema es el asunto.
Teniendo en cuenta estas principales características, es visible que todas sirven para crear una relación de empatía hacia el receptor y así tratar de convencerlo. Sean orales o escritos, los textos argumentativos son aquellos que tienen la intención de persuadir la postura del lector.
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